El presidente de Honor de la Real Academia Nacional de Medicina repasa, con dosis similares de rigor y amenidad, todos esos síntomas que pueden trastornar levemente o condicionar seriamente la vida cotidiana
Madrid, 3 de febrero de 2015.- El bostezo tiende a ser visto como signo de aburrimiento o desinterés manifiesto pero no siempre ha sido así. Cada cultura –los mayas, los romanos,…- le ha dado una interpretación distinta. En cambio, sí hay consenso científico: estamos ante un fenómeno contagioso y, como dice el refrán, anda el bostezo de boca en boca como la cabra de roca en roca. Este es uno de los veinte "Síntomas que todos padecemos" y que el profesor Manuel Díaz-Rubio ha reunido en un libro, editado por Arán ediciones, que hoy presenta en la Real Academia Nacional de Medicina (RANM), de la que es presidente de Honor.