Actualidad de la RANME · Nº 30

Actualidad de la RANM 47 REAL ACADEMIA NACIONAL DE MEDICINA DE ESPAÑA También fue muy importante el alemán Ferdinand Sauer- bruch, quien en 1904 ideó la cámara de hipopresión, ha- ciendo posible abrir la caja to- rácica sin que se produjera el colapso pulmonar a causa de la presión atmosférica. Pue- den considerarse tres etapas en el desarrollo de la Cirugía Cardíaca, que comenzó a fina- les de la década de 1930: 1. Etapa de cirugía extracar- díaca (ductus, coartacio- nes). 2. Cirugía cardíaca cerrada (comisurotomías, técni- cas paliativas en patología congénita). 3. Cirugía con circulación extracorpórea, que fue po- sible merced a los trabajos de Den nis en 1951 que re- sultó imprescindible para el desarrollo de la cirugía cardíaca actual, la cirugía a corazón abierto y parada cardio-circulatoria durante el procedimiento quirúrgi- co. Es difícil concentrar en pocas líneas los Premios y recom- pensas que han merecido los estudios y trabajos científicos del profesor Tamames, siem- pre despierto ante todo lo nuevo y desconocido. Termi- nó la carrera con 25 Matrícu- las de Honor y Premio Extraor- dinario en Licenciatura y del Doctorado. Su personalidad científica ha sido reconocida desde su juventud. Fue Beca- rio de la Dirección General de Relaciones Culturales, en Suecia, y de la Fundación Juan March, del Convenio de Car- diología Houston-Madrid. En Londres estudió con Brock y con Holmes Sellors, en Suecia con Craaford y Senning en Ci- rugía Experimental, y con Kje- llber en el Carolinska lnstitute/ én Dinamarca se interesó en Cardiovascular con Husfeldt en Coponhague. Visitó a Derra en Düsseldorf (Alemania), y en Cardiff en el Sully Hospital para Cirugía Cardiotorácica y en los Estados Unidos con De Bakey y Cooley. Ha sido un viajante de la cien- cia visitando Puerto Rico, Mé- xico, Argentina, Cuba, Chile, Brasil, Italia y Holanda. Ha sido un maestro de la Ciru- gía y de la Enseñanza. En relación con sus publica- ciones y trabajos científicos en distintas áreas de la Patología Quirúrgica, casi la mitad han hecho referencia a la Cirugía Cardíaca y Vascular. Era un cirujano rápido y se- guro. Como Profesor era bri- llantísimo. Enriqueció la Aca- demia con sus conocimientos, moderación y prudencia. Es una gran responsabilidad para mi haberle sucedido en el sillón 4, que actualmente lle- va la denominación que tanto le gustaba: Cirugía Cardio- vascular y Torácica. Espero que su recuerdo y su amistad me acompañen y allí donde se encuentre,su enamoramiento por la Cirugía Cardiovascu- lar le haya supuesto una ale- gre recompensa que uno de sus alumnos y discípulos in- tente representar a la Cirugía Cardiovascular y Torácica de la mejor manera posible en nuestra querida Real Acade- mia Nacional de Medicina de España. Opinión